NO AL 2x1 - Basta de domiciliarias a los genocidas! * SI NO HAY JUSTICIA... HAY ESCRACHE * A dónde vayan los iremos a buscar!

jueves, 14 de abril de 2011

“Las asesinaron y les robaron los hijos”

Habló de los partos y el secuestro de los niños de Laura Carlotto y de otra detenida, a la que identificó como “Rosita”. Dijo que el plan sistemático de apropiación de bebés fue planificado por las Fuerzas Armadas como colectivo.






María Laura Bretal fue secuestrada embarazada y dio a luz luego de salir de La Cacha.



Por Alejandra Dandan




“La Cacha era por la Cachavacha, la bruja que hacía desaparecer a los niños y eso era parte de las verdugueadas que nos hacían a las que estábamos embarazadas ahí, jugaban con eso, nos decían: ‘Ahora le vas a contar el cuentito de la Cachavacha cuando tengas a tu hijo’”, contó María Laura Bretal.
Apenas se sentó, al comenzar una nueva audiencia del juicio por el plan sistemático de apropiación de bebés, esa mujer, socióloga, que ahora tiene 58 años, miró el lugar donde deberían estar sentados los acusados. “Tengo conocimiento de los imputados –dijo–, pero no veo que estén presentes, me parecería interesante que estuvieran, para que se les refresque la memoria, para poder recordar el aberrante plan sistemático del robo de niños.” La presidenta del Tribunal Oral Federal 6, María del Carmen Roqueta, le explicó amigablemente que es un derecho de ellos no estar ahí. “Es un deseo, nomás”, dijo María Laura. “Me gustaría verles la cara como ellos nos habían visto a nosotros.”
María Laura fue convocada a declarar en el marco de la investigación de uno de los 35 casos del juicio, el del hijo de Laura Carlotto, el nieto de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, que estuvo detenida con ella en ese centro clandestino de detención de los alrededores de La Plata. María Laura fue secuestrada el 3 de mayo de 1978 en Ensenada con su hija de tres años y embarazada de cuatro meses. La secuestró un grupo de tareas integrado por la Policía Bonaerense y fuerzas del SIE (Servicio de Inteligencia del Ejército), al que identificó como una de las cinco fuerzas que operaban dentro del campo de exterminio y la misma fuerza a la que le adjudicó la posesión de Laura. Durante el trayecto, a su hija la cambiaron de auto. Después supo que esa noche la llevaron a su casa. “Obviamente se quedaron con las llaves, robaron. La nena se quedó dormida y al otro día avisaron a la madrugada a mi abuela diciéndole que la nena se había quedado sola en la casa porque yo me había ido a combatir con la guerrilla a Tucumán: así la había abandonado a mi hija.”
La Cacha

María Laura pasó una semana en el área destinada a las torturas. Permaneció en el centro clandestino desde el 3 de mayo hasta el 22 de agosto, cuando la liberaron. Estuvo quince días en las cuevas, descompuesta, con muchos vómitos y muy deteriorada. “Estaba engrillada, encadenada, un día me ataban los pies, al otro día me ataban las manos, siempre encapuchada.” A pedido de sus compañeros, pasó una semana en lo que llamaban el área de las embarazadas, un espacio con camas donde conoció a dos de ellas: Laura Carlotto o Rita y Rosita.
“Rita era una persona muy difícil de confundir: era hermosísima, morocha, alta, con el pelo largo, unos ojos inconfundibles, una mirada muy fuerte, y estaba destabicada porque hacía siete meses que ya estaba ahí. Así que yo a Laura ya la veo con un bombo de siete meses y estaba Rosita, que no supe quién era hasta hace muy poco que la reconocí en una foto, lamentablemente no es caso en este juicio pero ellas dos parieron adentro, las dos tuvieron a sus hijos varones, a las dos las asesinaron después y les robaron el hijo.”
Rosita tenía tres hijas. Con María Laura empezaron a enseñarle el jadeo a Laura y las cosas del preparto. Laura había tenido uno o dos embarazos antes, los había perdido y le resultaba muy raro, dijo, “que en esas situaciones infrahumanas en las que permanecíamos el embarazo podía llegar a término”.
Laura le contó que había sido secuestrado con su compañero, Chiquito; que ya habían secuestrado a su padre; que ellos militaban en la JUP, estudiaban historia y que a Chiquito lo habían fusilado un día después de llegar al centro clandestino. También le dijo que si su hijo nacía varón iba a llevar el nombre de Guido, su padre.
Para junio, Rosita, la otra embarazada, empezó el trabajo de parto. “Estaba casi postrada, estaba muy agotada así que casi no se movía, apenas iba al baño. Tiene su parto para el 18 o 19 de junio y la trasladan a la Unidad 8 de Olmos, porque al día siguiente uno de los guardias dice que había tenido un varón y, obvio, dijo lo que nos decían de todos: que la dejaron en libertad y que no habían tenido tiempo de comprarle el ajuar por lo rápido que fue el parto.” Nunca más nadie supo de Rosita y de su hijo, pero a partir de ese momento su partida se convirtió en una presión más para las embarazadas.
El 26 de junio, Laura empezó con contracciones y empezó a los gritos, un día que María Laura cree estar convencida de que era sábado: “El bebé nació el 26 de junio, pudimos sacar la fecha haciendo cuentas porque nosotros gritábamos que no pasara lo que le había pasado a Rita, que prácticamente lo tuvo ahí en La Cacha, porque los guardias habían estado tomando y no nos hacían caso y no tenían apuro por sacarla”.
En esas condiciones, empezaron a pedir temprano que la sacaran. Se la llevaron, uno o dos días después uno de los guardias del Ejército al que nombró como El Viejo Donoto, que era de los que más hablaban y más tomaban, les dijo que ya había tenido a su hijo. “Me olvidaba de que unas semanas antes –explicó– vino el que era como administrador en La Cacha y nos mostró el ajuar todo blanco que le habían comprado, que también era una forma de tortura psicológica para mí, que era la próxima.”
Diez días mas tarde volvieron a ver a Laura en La Cacha. Para entonces estaba confinada en el espacio llamado la Casita y sin su hijo. En esa ocasión, le dijo a María Laura que creía haber estado en un hospital militar porque había guardias armadas. La habían puesto en una habitación sola, tabicada, y había dado a luz engrillada. Que el parto fue normal, que había tenido un varón, que se lo dejaron de tres a cinco horas y que después ya no se acordaba más nada porque le habían dado una inyección. “Ella pensaba que era el hospital militar central, pero la verdad es que en ese momento no teníamos idea de lo que pasaba con las maternidades clandestinas”, indicó.
La salida

María Laura salió de La Cacha tres días antes del 26 de agosto, el día en que Estela Carlotto recibió el cuerpo asesinado de su hija. Cuando dejó el centro, Laura Carlotto todavía estaba ahí. Antes de irse, la habían escuchado gritar desesperadamente que estaba convencida de que la iban a matar, de que le habían quitado a su hijo.
María Laura fue liberada después del Mundial de Fútbol. Con ella salió otra secuestrada, Norma Akin, que entró cuando estaba de seis meses. María Laura explicó que las embarazadas del ’77 terminaron con los hijos apropiados, y lo mismo sucedió con las dos que compartieron 1978 con ella. Ella tuvo a su hijo en septiembre. Norma Akin también lo tuvo después de quedar liberada. En ambos casos, los apropiadores siguieron vigilándolas afuera. Cuando uno de los jueces le preguntó si creía que había alguna relación entre las fuerzas que operaban dentro del centro de exterminio y lo que sucedió con esos niños, ella dijo que las Fuerzas Armadas operaban como un colectivo, que el plan sistemático estuvo planificado por ese colectivo.
“¿Quiere decir algo más?”, le preguntó Roqueta al final. “Que me hubiese gustado que estuviesen imputados los ejecutores del plan sistemático, no sólo los ideólogos; que es muy importante que estén, (Reynaldo) Bignone en especial. Que hay que continuar estos juicios para encontrar a los culpables, cómplices y civiles que participaron, tanto médicos como jueces como la jerarquía de la Iglesia.”

SEGUIR LEYENDO [+]

Comunicado de prensa. 13 de Abril de 2011, Quilmes.







Esta Comisión repudia el accionar represivo por parte del gobernador de Santa Cruz, Peralta, a través de sectores de la UOCRA que responden al gobierno provincial y que se transformaron en la patota oficial, golpearon brutalmente a docentes que pacíficamente volanteaban a la orilla de la ruta, en la cuenca carbonífera, actividad programada para la primera jornada de las medidas de fuerza por 72 hs. en demanda de mejoras salariales.
El 2010 estuvo poblado de manifestaciones, cortes de calles y de ruta, movilizaciones, huelgas, ocupaciones de fábricas, de tierra y de edificios públicos, acampes, piquetes, las más diversas formas de pronunciamiento en defensa de los derechos obreros y populares. Pero también, en el 2010, Mariano Ferreyra, Los Qom, el Indoamericano, Bariloche, son una prueba de la responsabilidad del gobierno nacional en los hechos
represivos y ponen al descubierto su doble discurso.
Este gobierno mantiene las reformas antiobreras del menemismo, privilegia el pago de la deuda externa, las multimillonarias ganancias de su propio grupo económico, el compromiso con las empresas imperialistas de la minería contaminante, de la soja, del petróleo, de las grandes represas, la extranjerización de la tierra. Esta política es la verdadera contracara del discurso con el que se autodenomina progresista y defensor
de los derechos humanos, nacional y popular.

Salimos solidarios con la lucha de los trabajadores y trabajadoras docentes, y por el castigo a los funcionarios, empresarios y policías cómplices de la patota avalados por el gobierno nacional encabezado por Cristina Fernandez de Kirchner.

SEGUIR LEYENDO [+]

NO AL FALLO SEXISTA Y DISCRIMINATORIO DE LOS JUECES PIOMBO Y SAL LLARGUÉS

Comunicado de Prensa. La Plata, 13 de abril de 2011

Desde el Frente Popular Darío Santillán, repudiamos el fallo de los jueces de casación Piombo y Sal Llargués, que absuelve del delito de corrupción de menores a un imputado condenado por violaciones a niñas menores de edad, argumentando que las víctimas pertenecían a “comunidades en las que el nivel social acepta relaciones a edades muy bajas”.

En un fallo sexista y discriminatorio, el Tribunal de Casación de la Provincia de Buenos Aires resolvió reducir a la mitad la condena a prisión de un pastor de un culto no reconocido, que en el 2004 había violado a dos niñas de 14 y 16 años, fundamentando su resolución en que las niñas son “mujeres que viven en comunidades en las que el nivel social acepta relaciones a edades muy bajas; que además, poseían experiencia sexual- incluso en yacer con otros hombres- respecto de las cuales también operó el ejemplo brindado por otros sujetos para convencerlas de tener sexo natural con el objeto de estar en condiciones de concebir un hijo”.

Se sostiene que “…hay solo situaciones muy excepcionales de deterioro moral como las que implican despertar prematuramente la sexualidad de un menor no púber, o desviarla, llevándola al exhibicionismo masivo o a la aberración, o convencer de la naturalidad del trato sexual entre padres e hijos pueden permitir aplicar una figura que condensaba inicialmente ideas más pacatas o victorianas” y que los hechos sufridos por las niñas no son “moralmente edificantes” pero tampoco implican “un quehacer aberrante, repulsivo, que hiera la integridad sexual o que constituya, como se ha dicho, “la pompa de la deshonestidad”.

Entendemos que el contexto de vulnerabilidad en que se encuentran las víctimas, siendo niñas y pobres, se utiliza como argumento para absolver al imputado del delito de corrupción de menores, poniendo de manifiesto concepciones prejuiciosas y discriminatorias, y dando lugar a un proceso de re-victimización e invisibilización de las situaciones de violencia sexual sufridas por niñas y mujeres.

Estas resoluciones no son hechos aislados, sino parte de un sistema jurídico en el que prevalece una idea patriarcal, en donde las características o las condiciones socioeconómicas de las víctimas son tomadas como atenuantes. Se investiga a la víctima, sus costumbres, sus experiencias sexuales y de esta manera se la re-victimiza.
El sistema penal actúa entonces como un factor legitimador de estas prácticas así como de los estereotipos de género que las subyacen. Se estigmatiza a las mujeres por el solo hecho de ser mujeres, operando una doble condena si además de mujer, se es pobre.

Frente Popular Darío Santillán

Contacto prensa: Daniela Ramos - Presidenta de FULP: 0221-15-545-0274

SEGUIR LEYENDO [+]

HOY MÁS QUE NUNCA, LA ÚNICA LUCHA QUE SE PIERDE ES LA QUE SE ABANDONA

JUEVES 14 DE ABRIL 10HS TODOS A LA SEDE EDUCACIÓN (13 entre 56 y 57)

Luchamos por:
- Pago del aumento en las horas extras. No a la reducción de horas extras( compensación salarial)
- Devolución de la antigúedad en las horas
- Equiparación salarial. Ningún trabajador por debajo de $1000 de compensación
- Basta de represión, aprietes y amenazas de descuentos

Se realizó la reunión entre las autoridades de la D.G.C. y E.y representantes de la ASAMBLEA. Esta reunión resultó un fiasco ya que lo único que ratificaron los funcionarios, fue el acta firmada el 5 de Abril entre la D.G.C. y E. y las conducciones provinciales de los tres sindicatos a espaldas de la ASAMBLEA de trabajadores, la Junta Interna de ATE y delegados que no traicionan. La misma que es utilizada para amenazar a quiénes peleamos por justicia y dignidad.
Tal parece que en Educación pedís aumento y te dan palos! Oporto habla de democracia, y apertura al diálogo pero lo único que hace es reprimir, amenazar y recortar salario a los trabajadores.
LA LUCHA CONTINÚA

En la asamblea que se realizó ni bien terminó dicha reunión decidimos volver a convocar para mañana jueves a las 10hs, para redoblar esfuerzos y decidir los pasos a seguir en esta lucha.

JUNTA INTERNA ATE EDUCACIÓN

SEGUIR LEYENDO [+]